Si alguien consigue tu dirección IP (protocolo de Internet), seguramente pueda rastrear tus movimientos en Internet, enviarte anuncios dirigidos e incluso cometer ciberdelitos en tu nombre. Por supuesto, algunas de estas actividades pueden requerir algo más que tu IP, pero sigue siendo una pieza importante del rompecabezas. Así que vamos a ver para qué se puede utilizar realmente tu dirección IP y cómo puedes protegerte.
Comprende qué son las direcciones IP
Antes de entrar de lleno en las cuestiones relacionadas con las direcciones IP, cubramos rápidamente los aspectos básicos. Conocer la información esencial sobre las direcciones IP te ayudará a comprender plenamente los riesgos asociados. Así que, aunque ya sepas de lo que hablamos, un repaso rápido nunca viene mal: aquí tienes un breve resumen:
¿Qué es una dirección IP? | IP significa protocolo de Internet. Una dirección IP actúa como domicilio para ordenadores y otros dispositivos en Internet. Es vital para llevar tus datos del punto A al punto B de Internet: sin una IP, tu dispositivo no sabría cómo llegar a un sitio web o servicio y estos no sabrían cómo enviar tráfico de vuelta a su dispositivo. Normalmente, una IP tiene este aspecto: 104.124.145.85. |
¿Cómo obtengo mi dirección IP? | Tu dirección IP te la asigna tu ISP (proveedor de servicios de Internet). Todos los ISP tienen diferentes rangos de direcciones IP que les asignan los registros regionales de Internet, lo que les permite dar IP únicas a sus clientes de ese lote concreto. |
¿Cómo encuentro mi IP? | La forma más sencilla de averiguar tu dirección IP es utilizar una herramienta de comprobación de IP online, que suele ser gratuita, rápida y fácil de usar. Puedes dirigirte a nuestra página Cuál es mi IP y comprobar la tuya en segundos. |
¿Qué información puede obtener alguien de mi IP? | Tu dirección IP real puede revelar tu ubicación física aproximada y tu ISP (proveedor de servicios de Internet). Aunque no parezca mucho, las direcciones IP pueden caer en malas manos y causar algunos problemas. |
Entonces, ¿qué puedes hacer exactamente con una dirección IP? Sigue leyendo para conocer las principales amenazas asociadas a las fugas de direcciones IP.
¿Qué puedes hacer con una dirección IP?
Si tienes la dirección IP de alguien, puedes saber su ubicación física aproximada y averiguar su ISP. Por tanto, si alguien se hiciera con tu IP, podría utilizar esta información para estropear tu experiencia en Internet. Las cosas pueden ponerse especialmente arriesgadas si consiguen acceder a otro tipo de información, como tu Número de la Seguridad Social (NUSS) o tu DNI.
Veamos más de cerca lo que pueden hacer estos terceros si consiguen tu dirección IP.
Esto es lo que se puede hacer con tu dirección IP:
Vigilancia y control:
- Seguir tus actividades en Internet.
- Limitar el ancho de banda en función de tu actividad (ISP).
- Cambiar el precio.
- Restringir el acceso a sitios web.
Fines maliciosos y explotación:
- Mostrar anuncios dirigidos y spam.
- Lanzar ataques DDoS.
- Atacarte con phishing personalizado.
- Utilizar tu IP para actividades ilícitas.
- Vender tus datos en la dark web.
- Prohibirte participar en juegos online.
Seguir tus actividades en Internet
Una dirección IP es uno de los datos clave utilizados para rastrear tu actividad en Internet; por ejemplo, los propietarios de sitios web pueden utilizarla para identificarte, controlar tu comportamiento y adaptar cosas como los anuncios o los precios en función de tu ubicación o hábitos de navegación.
Limitar el ancho de banda en función de tu actividad
Al mirar tu dirección IP, tu ISP (proveedor de servicios de Internet) puede ver lo que haces online y decidir ralentizar tu conexión si cree que estás utilizando demasiados datos, como streaming, juegos o intercambio de archivos.
Cambiar el precio en función de la ubicación de la IP
Los sitios web pueden saber desde dónde navegas con solo comprobar tu dirección IP. A veces, ajustarán los precios basándose en esa información: si compras en Internet desde una zona o país de renta alta, puede que acabes viendo precios más altos que alguien de otro lugar.
Restringir el acceso en función de tu ubicación geográfica
¿Alguna vez has hecho clic en un vídeo o has intentado visitar un sitio solo para ver el error «no disponible en tu región»? Se llama geobloqueo: las direcciones IP revelan tu ubicación, por lo que los sitios web o los servicios online pueden restringir el acceso en función de tu ubicación física.
A diferencia de las prohibiciones de IP, estas restricciones no son personales y se aplican a todos los usuarios que se encuentren en esa ubicación física.
Mostrar anuncios personalizados
Los anunciantes pueden rastrear tu información controlando los sitios que has abierto, ya que les ayuda a difundir anuncios que coinciden con tus intereses. Y, claro, a veces eso es útil.
Sin embargo, también suele hacer que tus próximas búsquedas sean menos orgánicas. Tu motor de búsqueda podría estar más centrado en mostrarte cosas que cree que comprarás, basándose en tu dirección IP y otros datos personales, en lugar de ofrecerte los resultados más relevantes.
Lanzar ataques DDoS
Tu dirección IP también puede ser utilizada para ataques DDoS (denegación de servicio distribuida), intentos malintencionados de bloquear tu conexión a Internet saturándola con una avalancha de tráfico.
Piensa que es como abrir un millón de aplicaciones en un viejo portátil hasta que se bloquea. En un ataque DDoS, en lugar de aplicaciones, son solicitudes de conexión ininterrumpidas que bombardean tu red todas a la vez hasta que ya no puedes acceder a nada. Puede hacerlo un hacker aburrido, un jugador cabreado o cualquiera que quiera sembrar el caos y arruinarle el día a alguien.
Ejecutar ataques de phishing personalizados
Si un hacker se hace con tu dirección IP, podría averiguar quién es tu proveedor de servicios de Internet y utilizar esa información para hacerse pasar por él. A partir de ahí, pueden llevar a cabo elaborados ataques de phishing, intentando engañarte para que entregues datos de identificación personal. Si caes en la trampa, podrían robar tu identidad o vender tus datos financieros en la dark web.
Hacerse pasar por alguien para cometer actividades ilegales
Si los hackers consiguen instalar malware en tu sistema, podrían secuestrar tu dirección IP y hacer que su actividad parezca la tuya. De este modo, se pueden ocultar tras tu identidad digital e inculparte de cualquier actividad ilegal que cometan.
Ahora bien, no basta con conocer tu IP para que esto ocurra: normalmente implica amenazas de malware. Pero aún así, es un recordatorio de que tu IP podría utilizarse posiblemente como herramienta en manos malintencionadas.
Meter a alguien en problemas por infringir los derechos de autor
Del mismo modo, los delincuentes pueden falsear su propia dirección IP para que parezca la tuya y descargar contenidos hackeados o compartir archivos hackeados en Internet. Como resultado, podrías meterte en problemas por infracción de derechos de autor.
Vender datos en la dark web
Por sí sola, tu dirección IP puede no valer gran cosa. Sin embargo, cuando se combina con otros datos (como tu nombre, ubicación o datos de las redes sociales) se vuelve muy valiosa.
También se puede empaquetar con otras direcciones IP y perfiles para crear paquetes más grandes y venderlos a cualquiera, desde intermediarios de datos a estafadores o ciberdelincuentes reales.
Pero, ¿qué haces si tu vecino hackea tu wifi? Eso abre toda una nueva caja de Pandora. Pero no te preocupes: hemos escrito una guía completa sobre cómo proteger tu wifi de los vecinos.
Prohibir a alguien participar en juegos online
Que te bloqueen en los juegos online es más común de lo que crees, especialmente en los servidores más pequeños o indie. Mientras que los videojuegos grandes y populares suelen necesitar una razón sólida para bloquearte, los administradores de servidores privados o comunitarios pueden bloquearte solo porque les has molestado o, digamos, porque les has ganado en su propio juego.
La mayoría de estos bloqueos están vinculados a tu dirección IP. Así que, si quieres evitar que te bloqueen, utilizar una VPN para enmascarar tu IP es una solución bastante fácil.
Hackear dispositivos
Aunque hackear tu dispositivo no es tan sencillo como conocer tu dirección IP, puede ser un punto de partida. Junto con tu número de puerto, puede ser suficiente para que los hackers intenten entrar en tu red doméstica. Si lo consiguen, podrían propagar malware a tu dispositivo y apoderarse de él.
Es muy poco probable que por el mero hecho de que tengan tu IP, tu dispositivo acabe hackeado, pero la posibilidad siempre está ahí.
¿Cómo puede encontrar alguien tu dirección IP? Nueve métodos probables
Puede que pienses que no compartir tu dirección IP con nadie es más que suficiente para protegerla. Sin embargo, en realidad es bastante fácil que alguien encuentre tu dirección IP. Así es cómo funciona:
- Al conectarte a tu red: cualquier persona conectada a tu red puede averiguar fácilmente tu dirección IP porque una red proporciona la misma IP a todos los dispositivos conectados.
- Al ejecutar los sitios web que visitas: cada vez que abres un sitio web (esto incluye los sitios de redes sociales y cualquier formulario que se te pida rellenar), ese sitio web registra tu IP.
- Mediante anuncios: los anuncios, tanto legítimos como de phishing, también pueden registrar tu información si haces clic en ellos.
- Al leer los correos electrónicos que envías: algunos clientes de correo electrónico antiguos pueden mostrar tu dirección IP en el encabezamiento.
- Al moderar foros: si participas en debates online, los administradores de los hilos del foro pueden ver tu dirección IP cada vez que publicas.
- Al participar en el intercambio de archivos P2P: las tecnologías de intercambio de archivos revelan la dirección IP de cualquiera que esté subiendo o descargando archivos.
- Al crear puntos de acceso wifi falsos: el administrador del punto de acceso puede ver la dirección IP de cualquiera que se conecte al punto.
- Al acceder físicamente a tu dispositivo: si alguien consigue acceder físicamente a tu dispositivo sin que te des cuenta, puede obtener tu dirección IP en cuestión de segundos.
- Al usar ataques de ingeniería social: los hackers pueden obtener tu dirección IP haciéndose pasar por alguien y luego pueden conseguir que tú mismo reveles la dirección.
Cómo proteger tu dirección IP
Ahora que ya conoces los riesgos y cómo alguien puede acceder a tu dirección IP, hablemos de cómo puedes protegerla:
- Actualiza tu cortafuegos: los cortafuegos están ahí para protegerte, pero solo son tan buenos como sus últimas actualizaciones. Si no actualizas tu cortafuegos, puedes perderte importantes correcciones de seguridad y actualizaciones de rendimiento.
- Utiliza contraseñas seguras: asegúrate de utilizar contraseñas fuertes y únicas en todos tus dispositivos y cuentas, y actualízalas con regularidad. Las contraseñas débiles, recurrentes o anticuadas facilitan a los hackers los ataques de fuerza bruta (scripts que permiten a un ordenador seguir adivinando tu contraseña hasta que la acierta).
- Utiliza una VPN: una red privada virtual enruta tu actividad en Internet a través de uno o varios servidores, lo que oculta tu IP personal y te proporciona una nueva dirección IP. Esto hace prácticamente imposible que los hackers puedan rastrear la nueva dirección IP hasta ti. Si te preocupa que ciertos servicios prohíban las IP de VPN, una IP dedicada te ayuda a reducir ese riesgo dándote una dirección IP estática personal y única.
- Utiliza un proxy: si una VPN está fuera de tu alcance, un servidor proxy de confianza puede sustituir tu IP por una falsa mientras la utilizas. Ten cuidado con los proxy gratuitos, ya que pueden poner en peligro tu privacidad, así que asegúrate de elegir un proxy en el que puedas confiar.
- Comprueba tu configuración de privacidad: si utilizas un servicio que recopila tu información privada (por ejemplo, plataformas de redes sociales), comprueba la configuración de privacidad: muchos de los servicios te permitirán rechazar opciones o limitar dónde se comparte tu dirección IP real.
- Pide a tu proveedor de Internet una IP dinámica: aunque la mayoría de los proveedores de Internet asignan direcciones IP dinámicas por defecto, merece la pena volver a comprobarlo. En el caso de que tu ISP te haya dado una IP estática, solicita el cambio a una dinámica. De este modo, tu dirección IP se actualizará cada pocas horas más o menos, lo que dificultará que alguien pueda rastrearte o dirigirse a ti de forma sistemática.
- Utiliza datos móviles: tu conexión móvil te asigna una nueva IP dinámica cada vez que te conectas, lo que puede ser útil si necesitas un cambio rápido de tu red habitual.
¿Qué otras ventajas ofrece una VPN?
Más allá de cambiar tu IP, una VPN te proporciona más seguridad, más libertad y más privacidad en Internet. Aquí tienes algunas ventajas más que proporciona una VPN:
- Protege tus datos: una VPN cifra todos los datos procedentes de tu dispositivo, haciéndolos ilegibles para tu proveedor de servicios de Internet, para cualquiera que controle las redes locales o para los hackers que intenten aprovecharse de los puntos de acceso wifi públicos.
- Aumenta el acceso: algunos países tienen una censura opresiva en Internet que restringe o bloquea el acceso a las redes sociales o a los sitios web de noticias. Una VPN te permite conectarte a un servidor situado fuera del país, lo que te permite acceder libremente a Internet.
- Oculta tu ubicación: tu dirección IP puede delatar tu ubicación aproximada. Al utilizar una VPN para cambiar tu IP, puedes ocultar eficazmente tanto tu dirección IP real como tu ubicación real, lo que garantiza una mayor privacidad.
- Evita la limitación del ancho de banda en función de la actividad: algunos ISP ralentizan tu conexión en función de lo que haces en Internet, especialmente durante actividades que consumen muchos datos, como el streaming, los juegos o el intercambio de archivos. Una VPN oculta esa actividad, lo que dificulta que tu proveedor de Internet reduzca tu velocidad en función de tu uso.
¿Qué debes hacer si alguien tiene tu dirección IP?
Si alguien consigue tu IP, lo primero que debes hacer es cambiarla. Normalmente puedes hacerlo poniéndote en contacto con tu proveedor de servicios de Internet y pidiéndole que te asigne una dirección IP diferente o cambiando totalmente de proveedor. Si tu configuración de red cambia, tu dirección IP también debería hacerlo.
Una vez que tengas una nueva dirección IP, el siguiente paso es mantenerla a salvo y asegurarte de que no se vuelva a filtrar. Una de las formas más eficaces de hacerlo es utilizando una VPN fiable como Surfshark. La simple conexión a un servidor VPN oculta instantáneamente tu dirección IP real a terceros. Intenta mantenerte lejos de las VPN gratuitas, ya que normalmente carecen de las funciones de seguridad que realmente necesitas para ofrecerte protección.
Conclusión: toma el control de la privacidad de tu IP
Ahora ya sabes que tu dirección IP no es solo una cadena de números: puede utilizarse para restringir tu acceso a varios sitios web, rastrear tu información e incluso suplantar tu identidad. Afortunadamente, ahora también sabes cómo protegerte y puedes mantener tu dirección IP en secreto. ¿Con una VPN, quizás?
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Preguntas frecuentes
¿Debería preocuparme si alguien tiene mi IP?
Sí, deberías preocuparte un poco si alguien tiene tu dirección IP. Tener tu IP permite a otros prohibirte el acceso a juegos o sitios web, lanzar ataques DDoS o intentar descubrir tu información personal. Así que, si sospechas que alguien tiene tu IP, lo mejor es cambiarla y empezar a utilizar una VPN para protegerte.
¿Cuál es la diferencia entre una IP privada y una IP pública?
La principal diferencia entre una IP privada y una pública es la visibilidad: las IP privadas se utilizan internamente y no son visibles online, mientras que las IP públicas son las que ven los sitios web y los servicios de Internet cuando navegas:
• Dirección IP privada: estas IP se utilizan dentro de tu red doméstica o local para la comunicación entre tus dispositivos y tu router. Cada dispositivo de tu red tiene una dirección IP privada única, y otras redes pueden tener las mismas IP privadas sin conflicto, ya que solo se utilizan de forma interna.
• Dirección IP pública: es la dirección que asigna tu ISP para tu conexión a Internet. Es cómo te ve Internet, y es a lo que se refiere la gente cuando habla de rastreo de IP o privacidad online.
¿Puedes cambiar tu dirección IP?
Sí. Hay dos formas principales de cambiar tu dirección IP:
• Para cambiar tu IP de forma permanente, puedes solicitar una nueva IP a tu ISP.
• Para cambiar tu IP de forma temporal, simplemente utiliza una VPN. En cuanto te conectas a un servidor VPN, tu dirección IP visible cambia por la del servidor. Mientras utilices una VPN, tu IP real permanecerá oculta.
¿Cómo sé si mi IP se está filtrando?
Si utilizas una VPN y quieres comprobar si está filtrando tu dirección IP, puedes usar un comprobador de direcciones IP. Si la IP mostrada coincide con tu IP real, puede que haya una filtración. Sin embargo, si accedes a Internet sin una VPN u otros métodos de cambio de IP, tu dirección IP siempre estará visible: así es como funciona.
¿Qué hace un capturador de IP?
Un capturador de IP es un software que recopila las direcciones IP de los usuarios que hacen clic en un enlace específico. Alguien que intente recopilar direcciones IP puede compartir este enlace a través de DM y correos electrónicos o incluso colocarlo en anuncios para engañarte y que hagas clic en él.
¿Qué puede decirte una dirección IP?
Una dirección IP puede revelar tu ubicación física aproximada, el código postal y el nombre de tu ISP. Como también identifica tu conexión online, alguien con suficientes recursos también podría rastrear tu actividad en Internet.
¿Es legal rastrear una dirección IP?
En general, rastrear una dirección IP no es ilegal. Sin embargo, aunque rastrear la dirección IP de alguien puede no ser ilegal, utilizarla para cometer delitos o actividades ilícitas definitivamente sí lo es. Esto incluye ciberdelitos como el robo de identidad, los ataques DDoS y la infracción de las leyes de protección de datos y privacidad para mostrar anuncios dirigidos.
¿Cómo puedo saber si mi dirección IP ha sido hackeada?
Técnicamente, una dirección IP no se puede hackear: es solo un número asignado a tu red.
Lo más parecido a que «hackeen» tu dirección IP es que alguien obtenga tu IP y la utilice con fines malintencionados, como lanzar ataques o suplantar tu identidad en Internet.