¿Qué es un proxy abierto y cuáles son los riesgos de usar uno?

Los proxies abiertos son servidores que funcionan como intermediarios entre el usuario e internet, y enrutan tu tráfico a través de ellos. Aunque los proxies abiertos ofrecen algunas ventajas, también presentan algunos riesgos considerables. Veamos qué son los proxies abiertos, sus ventajas e inconvenientes y cómo puedes detectarlos y gestionarlos.

¿Qué es un proxy abierto?

Un proxy abierto es un tipo de servidor proxy de acceso público. A diferencia de los proxies privados que requieren autenticación, los proxies abiertos permiten a todos los usuarios de internet conectarse y transmitir su tráfico online a través de ellos. Pueden configurarse específicamente para uso público o surgir de sistemas afectados y servidores mal configurados.

Cuando usas un proxy abierto para conectarte a una web, la solicitud se dirige primero al servidor proxy. A continuación, el servidor usa su propia dirección IP (protocolo de internet) para reenviar la solicitud al sitio web de destino y anonimiza tu conexión.

¿Cuáles son las ventajas de un proxy abierto?

Aunque los proxies abiertos conllevan riesgos importantes, también presentan algunas ventajas. Veamos algunas de ellas:

1. Enrutar tu tráfico a través de un proxy abierto te permite conectarte a internet de forma indirecta, reducir tu huella en la red y que sea más difícil rastrearte.
2. Al enviar tu tráfico a través de un servidor proxy, se te asigna la dirección IP del servidor proxy: enmascarar tu dirección IP y tu ubicación física aumenta tu privacidad online.
3. Cuando estás de viaje, puede que no puedas acceder a algunos sitios web que frecuentas (por ejemplo, tus servicios bancarios). Conectarte a un servidor proxy abierto puede ayudarte a acceder a los contenidos y servicios de tu país.
4. Los proxies abiertos suelen ser gratuitos, lo que los convierte en una opción atractiva para quienes desean anonimizar su actividad online sin rascarse el bolsillo.
5. Los proxies abiertos no suelen requerir instalaciones ni configuraciones de software; por esta razón, son una opción rápida y sencilla.

¿Cuáles son las desventajas de usar un proxy abierto?

Da la sensación de que un proxy abierto solo tiene ventajas, pero echemos un vistazo a los inconvenientes que presenta:

1. Una de las mayores desventajas de los proxies abiertos es su falta de seguridad. Muchos proxies abiertos no cifran los datos, lo que los hace más vulnerables, y expone la información sensible a los hackers y otros actores maliciosos.
2. Hay servicios de proxy abierto cuestionables que guardan un registros de las actividades de los usuarios. Esto puede comprometer tu privacidad si el proveedor decide vender estos registros a anunciantes o compartirlos con ciberdelincuentes.
3. Los proxies abiertos tienden a ofrecer una conectividad y velocidad poco fiables: como la mayoría son gratuitos, los servidores de proxy abiertos se saturan con facilidad y esto provoca frecuentes caídas y afecta a su buen funcionamiento.
4. El uso de proxies abiertos para acceder a contenidos restringidos puede infringir los términos y las condiciones de servicio de algunas plataformas y sitios web. A veces, incluso puede acarrear problemas legales (en particular, si el proxy se usa para actividades ilícitas).
5. Al no filtrarse el tráfico, también penetra el tráfico malicioso, es decir, los proxies abiertos se convierten en un caldo de cultivo para ciberataques, spam, malware y otros riesgos para la seguridad.
6. Debido que las conexiones proxy abren las puertas a actividades fraudulentas y maliciosas, muchos operadores de sitios web y redes, así como los ISP (proveedores de servicios de internet), restringen o bloquean el tráfico procedente de direcciones IP proxy abiertas conocidas.

¿Por qué la dirección IP que usas se ha señalado como «proxy abierto»?

Hay varias razones por las que tu dirección IP se habría señalado como proxy abierto. Aquí te dejamos algunas:

• Uso indebido de la IP: si la dirección IP se ha utilizado anteriormente con fines maliciosos ―como hackeos o spam―, podría haberse denunciado en varias bases de datos.
• Errores de configuración: a veces, los errores de configuración de la red o del servidor exponen la dirección IP, dejándola abierta para uso público, lo que puede provocar que acabe identificándose de forma errónea como proxy abierto.
• Uso compartido de la red: en redes públicas o compartidas (como las redes wifi de cafeterías, universidades, etc.), varias personas usan la misma dirección IP al mismo tiempo. Esta actividad podría identificarse como «proxy abierto», sobre todo si alguien en esa red se involucra en una actividad sospechosa o ilegal.
• Sistema comprometido: tu dirección IP también puede acabar identificada como sospechosa si tu sistema ha sufrido hackeos o ataques de malware y se ha convertido en un servidor proxy o si se ha usado como parte de una red de bots.
• Tráfico sospechoso: si tu dirección IP muestra un tráfico inusual que se asemeja a un proxy abierto —por ejemplo, un gran número de conexiones a través de múltiples destinos o cambios rápidos de ubicación— puede ser detectada como tal.

Un problema común entre los internautas es que Instagram señala la IP como un proxy abierto. Las plataformas de redes sociales (en particular Instagram, al parecer) bloquean o restringen las cuentas que usan direcciones IP identificadas como proxies abiertos para preservar la seguridad y evitar el spam, los perfiles falsos y la automatización no autorizada.

Cómo detectar un proxy abierto

Un proxy abierto puede detectarse mediante varios métodos, entre ellos:

• Verificadores de proxy online: sitios web y herramientas, como WhatIsMyIP.com e IPLeak.net, creados específicamente para comprobar direcciones IP. Envían peticiones a través de un servidor, comprueban las respuestas y determinan si actúa como un proxy abierto.
• Técnicas de verificación manual: puedes detectar proxies abiertos con herramientas como Telnet o comprobando cómo actúa tu conexión cuando visitas sitios web específicos.
• Análisis de la configuración de la red: comprueba la configuración de la red —que encontrarás en los ajustes de red o de internet— de tu dispositivo para detectar si hay configuraciones de proxy habilitadas.
• Análisis de seguridad automatizados: el software que analiza los servidores en busca de puertos abiertos y vulnerabilidades o fallos de seguridad puede indicar la presencia de un proxy abierto.
• Análisis del tráfico: los proxies abiertos pueden detectarse supervisando el tráfico de red en busca de patrones o incoherencias característicos de los servidores proxy.
• Análisis de los registros del servidor: el análisis de los registros del servidor permite detectar actividades o patrones de uso inusuales que indican la actividad de un proxy abierto (por ejemplo, múltiples solicitudes de fuentes desconocidas).
• Herramientas de análisis de la red: herramientas como Nmap analizan las redes en busca de puertos abiertos asociados a proxies abiertos.

Cómo desactivar un proxy abierto

Si has descubierto que usas un proxy abierto, te explicamos cómo desactivarlo:

En Windows

1. Abre Configuración.
2. Ve a ​​Red e Internet > Proxy.
3. En Configuración manual del proxy, desactiva la opción Usar servidor proxy.
4. Deshabilita la opción Detectar la configuración automáticamente.
5. Haz clic en Guardar.

En macOS

1. Abre los Ajustes del Sistema.
2. Ve a Red > Wi-Fi.
3. Haz clic en el botón Detalles… junto a la conexión de red activa.
4. Ve a Proxies y desactiva todas las opciones proxy.
5. Haz clic en Aceptar.

Conclusión: los proxies abiertos no merecen la pena

Aunque los proxies abiertos ofrecen un mayor anonimato en internet de forma gratuita, también conllevan grandes riesgos, como fallos de seguridad, problemas de privacidad e incluso problemas legales. Es fundamental tomar consciencia de estos inconvenientes y comprobar con frecuencia la configuración de la red; de este modo, no usarás un proxy abierto sin saberlo.

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